
Crash es una de esas películas de las que nadie sabía nada hasta que la Academia de los Oscar de Jolivú decidiera otorgarle el mayor título de dicha academia: el oscar a la mejor película.
Y si alguna lo merecía dentro del cine jolivudiense, esa era Crash.
Es una película que no te deja indiferente, intercambiando actitudes de una escena a otra, despertando sensaciones buenas y malas, provocando en tí la rabia, la tristeza, la impotencia en ocasiones , pero jamás la risa aunque sí la alegría.
Yo destacaría lo maduro del trabajo de Sandra Bullock, teniendo en cuenta que no es actriz de mi devoción. Me ha resultado grato verla en un papel que se sale de sus convencionales protagonismos, en el que se le ve profesional, casi consiguiendo olvidar que es ella la que actúa. Aunque quizá también ayude el que no sea uno de los roles más importante de la película.
Por otro lado, es obligado mencionar a Matt Dillon y su impecable interpretación tanto en una dirección como en la otra; así como la belleza de Thandie Newton, en su papel como esposa altiva de un exitoso director de televisión (la pareja despertó en mí las sensaciones más duras, a la vez que las más tiernas).
Crash es una historia de vidas que chocan entre sí, de mezclas entre el blanco y el negro, del bien y del mal y de hasta dónde somos capaces de juzgar sin profundizar en el origen de una u otra reacción.
Estoy deseando que llegue el momento en el que pueda comentarla con el cacahuetis!
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home