De aquí no me muevo!

15.4.06


Una película como mínimo sorprendente, que nos sitúa en el nacimiento del género porno.
Nada que ver con la vulgaridad y el mal gusto del porno contemporáneo, aunque algunas escenas puedan superarlo en escándalo y provocación. Sin embargo, a pesar de que la película es un documental bastante interesante para comparar el antes y el después de ese género, sigue dejando un gran hueco en lo que al depertar de la líbido se refiere. En mi caso, ni unas ni ésta han conseguido que "me castigue" mi apetito sexual como lo haría, por ejemplo, cualquier escena erótica de la película Herida.
La película, dirigida por Michel Reilhac en 2002, es una recopilación de pequenios cortos que se exhibían en los burdeles franceses para mantener el ambiente, mientras los clientes esperaban su turno .
A destacar el último corto, una pieza realizada en versión de dibujos animados de la época, llena de humor y muy bien trabajada (en mi opinión!).
Golfos y Picardías (de antanio) habría sido motivo de el peor de los escándalos si hubiera salido a la luz en los anios en los que fueron grabados los cortos: presenta desde relaciones sexuales entre dos párrocos, hasta felaciones practicadas nada menos que por perros, lo cual puede resultar chocante y desagradable si no se sigue la película recordando en todo momento su significado documental.
Además, la película pone un poco en duda la profesionalidad y nivel de las actrices pornos de hoy en día, que tanto luchan por ser reconocidas como tales: actrices. Las de este documental son simples prostitutas que aceptaron grabar los cortos por muy poco dinero, sin tener idea alguna de interpretación, pero con bastantes buenos resultados.
Aunque el cine porno sea entendido como tema tabú (todavía hoy en los tiempos que corren!) y aunque esté de mal gusto hablar de él, recomiendo esta película por su valor documental, porque siempre se puede sorprender a los contertulios de una importante cena preguntando: qué piensan ustedes sobre el inicio del cine porno allá por los anios 20?
Nota: El cacahuete cree que se me debería encarcelar por este tipo de recomendaciones; ya sé qué regalarle para su "piiii" cumpleanios...